miércoles, 18 de enero de 2017

Todos negros

Editorial - Por Carlos Gianella

NUNCA UNA PUBLICIDAD, COMO LA DEL AIRE A 24 GRADOS, DEJÓ EN EVIDENCIA TAN CLARAMENTE LO QUE PIENSA UN GOBIERNO DE SU PUEBLO.

Oscar Valdes, el mecánico que protagoniza la publicidad del Ministerio de Energía y Minería de la Argentina en “poné el aire a 24”, es quizá el actor involuntario de una pieza publicitaria llena de prejuicios y clichés de la clase alta sobre su percepción de los trabajadores.

“Hola, mi nombre es Oscar, soy el mecánico del barrio, el año pasado cuando hubo corte(s) de luz fui uno de lo(s) que cortaba la calle con lo(s) vecino(s)”.

Todas las “eses” finales del párrafo anterior están entre paréntesis ya que Oscar no las pronuncia, porque como bien sabemos, los mecánicos de barrio no saben hablar correctamente. El prejuicio queda mejor marcado en la traducción que la publicidad hace sobreimpresa en el video y que nos deja una enseñanza contundente. Como por arte de magia las “eses” aparecen en la pantalla para que quede claro que el bruto es el mecánico y no el que encarga la publicidad. Mecánico bruto.

El spot deja dos mensajes fantásticos. El mecánico dice textualmente que después de protestar por los cortes de luz del año pasado “había muchos (vecinos) de los que estaban haciendo el corte que iban y ponían los aires a 18 en vez de 24”. Impresiona que el mensaje del gobierno diga que el corte haya sido exitoso, ya que “iban y ponían el aire a 18”. Volvió la luz, viva el corte de calles. Pero hay una parte que asusta: el conocimiento de Oscar de a cuántos grados ponen los aires los vecinos de su barrio (en plural, se ve que les fue bien a los vecinos los últimos años). 

Chismoso alta gama que dice sin decir: desde el Estado sabemos lo que haces en tu casa con el aire y su temperatura. Como cualquier gobierno de derecha, asustar a la población es parte del manual, pero hacerlo publicidad nunca lo había visto. Quizá esté equivocado y entre golpe de cacerola y grito pelado los vecinos del mecánico Valdes se comentan lo que harían al regresar la luz a sus hogares. Diálogo que no estaría ligado a la comida de la heladera, el agua potable o bajar por el ascensor a un abuelo.

Para Oscar Valdes (Peña Braun Menéndez) la luz “es como la salud, no te das cuenta hasta que te falta”. Una opafrase muy interesante, porque ya sabemos que los mecánicos de barrios humildes no saben bien si tienen salud o luz. Son negros. “(…) Cuando te cortan la luz te das cuenta que es muy necesaria”, redunda la pieza publicitaria sobre el concepto del mecánico sin conocimiento de la importancia de la luz hasta su ausencia. Es que ya sabemos que el negro no valora hasta que pierde lo que tiene, pero no por desagradecido (como si se lo regalaran) sino por falta de comprensión.

Por eso, como señala el copete de este editorial, nunca una publicidad dejó en evidencia tan claramente lo que piensa un gobierno de su pueblo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario